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Mostrando las entradas de 2009

Fin de la jornada... una inestimable confusión

Fin de la jornada. Día 16 del mes. Día 4 de la semana. Jueves. Nada fuera de lo normal. 6 de la tarde. Voy convencido a ver una muestra fotográfica en Palermo a las 21 que, en realidad, es el miércoles 23, pero aunque para enterarme de eso hay tiempo: faltan casi 2 horas y media. Me tomé el subte y me adentré en la vorágine y la desazón cotidiana que se padece en la mayoría de los vagones de la empresa encargada del servicio en las horas pico. Estación Palermo, casi sin querer, por estar mirando a alguna mujer, me paso, pero bajé bien. Estoy relajado. Pregunto en un kiosco dónde es Gorriti y me indican, sin demasiada exactitud, sólo la dirección en la que debía caminar. Tomo por Godoy Cruz y camino sin saber cuantas cuadras me restan. Sin apuro y sin buscarlo me pierdo en el paisaje. Los árboles, las casas, el sonido del tren a mi derecha. Saco fotos que guardo en mi memoria, esas que quedan muy grabadas porque uno las está viviendo. Hago muchas capturas y diferentes tomas. Establezco

Un fuerte nudo en el pecho... y un pasado que se une con el presente

Respiro profundo, la respiración entrecortada, La cabeza aturdida de tanto pensar, Las ideas separadas, distantes, un montón de caminos por unir. Necesidad imperiosa de buscar respuestas a muchas preguntas. De decir cosas que no se han dicho, volver a caminar por donde ya lo he hecho pero con mucho cuidado. Revelar cosas que aún están oscuras. Echar un manto de luz de a poco sobre todo aquello que hasta ahora no se deja ver. Poder ver y sentir, permitirme ver y sentir.

Me indigno cuando…

Hay injusticias Cuando los asesinos salen libres a la calle sin haber cumplido la totalidad de sus condenas beneficiados por las leyes irrisorias del menemato Cuando nos toman el pelo Cuando no nos escuchan Cuando se cagan en nosotros Cuando socavan nuestra moral y nuestros ideales Cuando creen que pueden hacer lo que quieren con nuestro dinero Cuando no se respeta a la gente Cuando miro a mí alrededor y a mi mismo al espejo y me doy cuenta de que en algún punto, en mayor o menor medida todos contribuimos a ser hoy la sociedad que somos. Cuando la vida del otro vale menos que el papel que está tirado en el piso Cuando viajo en colectivo y no paran en las paradas porque están llenos, como el chofer con el que viajé la semana pasada de la línea 64. Y aún más cuando una persona que está pidiendo por favor que le abran que necesita ir al hospital, casi llorando, tampoco lo hagan. Ni aún habiendo hecho espacio nosotros como pasajeros para que ella subiera. Pero por suerte gracias a la colab

Urgente...

Urgente... es una palabra con la que vivimos día a día en nuestra vida agitada y a la cual le hemos perdido ya todo el significado. Urgente... es ya, un ritmo de vida… una forma de "pasar" nuestra vida. Urgente... es la manera más pobre de vivir en este mundo, porque el día que nos vayamos, dejaremos pendientes las cosas que VERDADERAMENTE fueron URGENTES. Urgente... es que hagas un alto en tu ajetreada vida y por un instante te preguntes: ¿Qué significado tiene todo lo que hago? Urgente... es que cuando camines por la calle, levantes la vista, y mires a tu alrededor; observes el cielo, los árboles, los pájaros y a la gente. Urgente... es que seamos más humanos… más hermanos Urgente... es que una mañana, te levantes temprano y veas salir el sol, sientas su calor y le des gracias a la naturaleza por darte un regalo tan grande. Urgente... ¡es que te sientas vivo en cuerpo y alma! que veas tus brazos, tus piernas, tu cuerpo, tu inteligencia, y de verdad ¡vibres con la vida! Urg

Una meta, un camino

Un día las cosas parecían haber cambiado. Esta vez su mirada frente a la misma situación por la que había pasado durante la mayoría de su vida era diferente. Y lo sentía así porque por primera vez estaba enfrentando la realidad con la certeza de que había un cambio posible. Con la convicción de que podía mejorar. Una charla con alguien a quien quiere muchísimo, le había revelado la verdad. Y cuando se levantó la mañana siguiente, con todas la ideas dando vuelta de la noche anterior, con algunas cosas que ordenar, se dispuso a comenzar con lo que sabía que hace tiempo tenía que hacer. Había que empezar por algún lado, y lo mejor es hacerlo con las prioridades que siempre postergamos por diferentes motivos. El siempre supo como debía encarar el tema, pero hasta ahora le habían faltado las fuerzas y las ganas. Pero desde hace poco tiempo todo es real. Todo aquello lo entusiasmaba, le daba ánimo todos los días. Porque se había fijado una meta. Se proponía llegar a cumplir un sueño. A largo

Los medios parecen sólo hablar del dengue

Los medios parecen sólo hablar del dengue. Dejaron de haber en la agenda otros temas importantes. Atrás quedaron la inseguridad o los irrisorios índices del Indec, o las estúpidas e insignificantes peleas entre nuestros nefastos políticos sobre las adelantadas y patéticas elecciones del 28 de junio. El mosquito que nos acecha a todos vino desde el norte y para quedarse, para matarnos a todos de miedo, asustarnos bien y que nos quedemos en casa, o por lo menos eso es lo que intenta la prensa en general, y noticieros en particular como el de 13 o más bien multimedios como Clarín. Con periodistas a quienes respeto mucho, pero que no comparto el tono amarillista con el que se trata o manipula la información. Información que nos llega a cada uno de nosotros, a nuestras casas y genera terror. Y en situaciones como éstas debe mantenerse la calma y actuar con prudencia y la misma “despreocupación” que se tuvo cuando la epidemia no estaba tan cerca nuestro. Aunque no por eso digo que no se haya

Extrañaba...

Extrañaba. De verdad, mucho, sin ocultarlo, sin miedo a lo que dijeran los demás o como lo juzgaran. Extrañaba despierto y dormido. Y soñando. Y soñaba con no extrañar e igual lo hacía, era cuando más le sucedía. Cuando a veces trataba de borrar esa sensación de su mente, cerrando los ojos y tratando de pensar en cualquier cosa, era absolutamente en vano. Extrañaba. Sin miedo, sin consuelo, sin problemas, sin palabras. Llenando hojas y espacios vacíos. Permaneciendo en silencio o hablando. Extrañaba el todo y cada una de las partes. Extrañaba en pequeños e ínfimos y en cuantiosos y considerables detalles. Extrañaba porque sí, ¿Por qué no? Extrañaba con convicción y a veces con escepticismo. Extrañaba con nombre y apellido. En mayúsculas o con minúsculas. En imprenta o en cursiva. Con determinación e indeterminación. Con exactitud e imprecisión. Siendo lo más objetivo e imparcial como lo más subjetivo y personal que podía. No reparaba en tiempos ni espacios, no había tiempos ni espacios

I won't give up! Cause I believe in dreams

Había soñado con vos anoche, y apenas me levanté vi tu imagen frente a mis ojos. Era muy real. Aún podía sentir tu perfume cuando me desperté con una sonrisa. Y me quedé con los ojos cerrados para no perderte, para que no te fueras, sólo para compartir un rato más juntos. Abrazados o sólo mirándote, algo que podía hacer durante horas. Contemplando esa sonrisa que ilumina esos hermosos ojos marrones. Sabés que yo te busco hasta despierto. Disfrutás de mi compañía y yo de la tuya, y me gusta que así sea. Me encanta tu manera de ser y a vos la mía. Tardaste poco en darte cuenta, que importaba el tiempo en este caso, tarde o temprano, antes o después, las cosas simplemente sucedían. Y como todo sueño hay que luchar para alcanzarlo. Y el camino puede ser complicado, pero maravilloso a la vez. Y como el amor, una promesa o como mantenerse firme ante un ideal y no perderse en el intento, requiere dedicación y perseverancia. Y sobre todo que te enteres, que no voy a darme por vencido.

Todo se desmorona...se derrumba

No tiene sentido decía el. Nada de esto. Si miro hacia atrás y recuerdo aquellos años, no puedo encontrar nada positivo. Ni en mi vida, ni alrededor mío. Pasé años ciego, pensando que todo estaba bien, buscando de alguna manera no reconocer todo lo que me pasaba y sucedía al mismo tiempo con las personas que estaban a mi lado. Pero tarde o temprano todo se paga. Tanta necedad junta no encuentra remedio en unos minutos. Nada se soluciona por arte de magia. Al contrario todo lleva tiempo. Meses, años, tiempo, valioso y pocas veces considerado tiempo. Sin lugar a dudas todo aquello que se había construido ladrillo por ladrillo con tanta dedicación y esmero se caía sin que nadie lo notara. Y cuando menos lo esperaba sucedió. Cómo debía ser, sin previo aviso, para sorprender, para que no pueda responder rápidamente, dejándome con las manos vacías y esa profunda sensación de haberlo perdido todo. Y cuando miro la construcción que tenía hasta hace un instante, sólo veo material deshecho, como

Desde mi cama, miro la lluvia por la ventana

Miré por la ventana aquella lluvia, aquella noche, anoche. Una suave brisa refrescaba mis ideas y de vez en cuando alguna gota golpeaba mi cara. Pero parecía no molestarme, nada parecía hacerlo. Llovía torrencialmente pero yo estaba muy cómodo en la posición en la que me encontraba. La ventana abierta daba hacia la calle y mi mirada estaba centrada en algún punto del asfalto en la avenida. Llovía y en mi cama las cosas eran fáciles. Afuera sin embargo una mujer que tenía que llegar a su casa después de una cena con amigos corría para protegerse bajo un alero en la calle Defensa, y un San Telmo desolado la observa sin siquiera inmutarse. Un vagabundo que dormía en Santa Fe y Callao se despertó cuando empezaba a mojarse sin poder volver a conciliar el sueño. Y la vida en Buenos Aires transcurría sin sobresaltos. Llovía y en mi cuarto reinaba el silencio y yo pensaba. En Corrientes a la altura de Paraná un joven camina sin saber a donde va, sin importar la hora, siente la lluvia mojar tod
Un intercambio de mensajes entre individuos. Un proceso que implica la transmisión de una determinada información. Una forma de relacionarse que todos usan y dominan a la perfección. La comunicación, fluye sólo a los fines personales. Poca es la búsqueda para lograr una vía de comunicación que se genere más allá de una conveniencia personal. Y se producen lo que podríamos llamar déficits comunicacionales, o falta de comunicación. O bien podríamos decir que la herramienta maravillosa que ha de ser el lenguaje, en cualquiera de sus formas, deja de tener consistencia y sustento en nuestros tiempos. Nadie parece prestar atención al otro, a lo que los demás necesitan, porque no es necesario escucharnos. Corremos para llegar al trabajo o cuando tenemos que irnos para casa, corremos para llegar a encontrarnos con alguien, o cuando volvemos. No hay un porque, una razón, una explicación que justifique estar tan apurados y no reparar en una hora, un minuto o quizás sólo unos segundos en nosotros

Mi viaje al norte

Gente hermosa que conocí en mi viaje de Tucumán a Jujuy. Faltan Emi, Macu, Tami, Lu, Juli y Valen. Compartí también buenos momentos los dos primeros días con Claudio, Pablo y Rocío mis primeros compañeros de viaje.

Tucumán día 1

Después de 14 horas de viaje llegué a San Miguel de Tucumán. Fui a la Oficina de Turismo en la estación de ómnibus y averigué cual era el camping por el que yo había averiguado el día anterior, que era municipal. Me dijeron que no era conveniente que fuera ahí, que era peligroso, que no tenía seguridad, ni agua caliente. Bien, entonces desistí y el camping más cercano queda a 40 kilómetros de San Miguel. Se llama el Cadillal y es privado y muy seguro. Los servicios que hay para allá son 3 y en horarios muy dispares como a las 10, a las 14.30 y a las 18.30 y lo mismo o parecido para volver de allá. Mi situación era bastante complicada dado que los chicos llegan mañana y tengo que estar a las 7 de la mañana en la terminal para recibirlos y partir para Tafí del Valle. Con lo cual cuando a la tarde temprano me enteré que venían mañana y no pasado como yo pensaba decidí quedarme definitivamente en la capital. Fui a la Oficina de Turismo en el centro y averigué por los hostels más cercanos y