Había soñado con vos anoche, y apenas me levanté vi tu imagen frente a mis ojos. Era muy real. Aún podía sentir tu perfume cuando me desperté con una sonrisa. Y me quedé con los ojos cerrados para no perderte, para que no te fueras, sólo para compartir un rato más juntos. Abrazados o sólo mirándote, algo que podía hacer durante horas. Contemplando esa sonrisa que ilumina esos hermosos ojos marrones. Sabés que yo te busco hasta despierto. Disfrutás de mi compañía y yo de la tuya, y me gusta que así sea. Me encanta tu manera de ser y a vos la mía.
Tardaste poco en darte cuenta, que importaba el tiempo en este caso, tarde o temprano, antes o después, las cosas simplemente sucedían. Y como todo sueño hay que luchar para alcanzarlo. Y el camino puede ser complicado, pero maravilloso a la vez. Y como el amor, una promesa o como mantenerse firme ante un ideal y no perderse en el intento, requiere dedicación y perseverancia. Y sobre todo que te enteres, que no voy a darme por vencido. ...
Este es un lugar al que vengo cuando me quiero olvidar del mundo. O tal vez acordarme de otras épocas, o proyectar hacia el futuro. Un espacio para dejarme llevar y expresarme tal cual soy. Para volar, viajar, y disfrutar de las maravillosas herramientas que nos da nuestro lenguaje, las palabras.